Dicen en algunos
mentideros que detrás de la Operación Armada estaba el anterior monarca de
España, que Juan Carlos I era el elefante blanco de aquello que conocemos como
el 23F, así que tal vez el hoy Rey emérito metió a Antonio Tejero y a sus
secuaces aquel lunes en el Congreso de los Diputados.
El actual Ministro
del Interior, Jorge Fernández Díaz, dice que atendió personalmente al imputado
por el Caso Bankia Rodrigo Rato porque “era su deber” y que no es “éticamente
reprochable”. Así que quien ocupa tan alta cartera metió en su despacho al
incriminado en uno de los más sonados casos de corrupción.
Más de tres millones
de personas se manifestaron en toda España el 15 de febrero de 2003 para pedir
que nuestro País no participara en la invasión de Irak. Aznar, al que se le
puso dura (la tozudez) en Las Azores, despreció aquel grito de los ciudadanos y
excusándose en una mentira nos metió dentro una guerra que llenó de cadáveres
el lugar donde ocurrió y los lugares donde unos políticos la fraguaron.
El 13 de noviembre de
2002 el buque Prestige sufrió un accidente. Cargado con 77000 toneladas de
fuelóleo se partió seis días después en dos derramando su contenido. Los
técnicos recomendaban llevarlo a un puerto pero los políticos implicados,
Álvarez Cascos, Rajoy y Aznar entre ellos, no les hicieron caso y lo metieron
mar adentro con la intención de alejarlo, provocando así la mayor marea negra
de la historia.
Metieron a corruptos
en sus listas electorales.
Metieron dinero
público en los bancos (rescate).
Metieron la reforma
laboral con reducción de las indemnizaciones por despido improcedente y la
ampliación de causas de despido objetivo.
Metieron la reducción
en las pensiones.
Metieron minoraciones
en el presupuesto contra la violencia de género.
Metieron un plan de
privatizaciones en empresas de servicios esenciales.
Metieron el copago y
recortes en sanidad.
Metieron la Lomce y
tijeretazos en educación.
Metieron dinero en la
tauromaquia.
Metieron el repago y
la subida de tasas en Justicia.
Metieron la Ley
Mordaza para poder meter multas o en la cárcel a los que les molestan.
Metieron una subida
de 8% al 21% en el IVA cultural.
Metieron una
merma de más del 60% en ayudas al desarrollo.
Metieron el olvido y
el menosprecio en las
familias con dependientes a su cargo y en los amenazados de desahucio.
Metieron a toda prisa
una reforma constitucional para meter por vía de urgencia la inmunidad del Rey
saliente.
Dejaron metidos en
las fosas de las cunetas a los ejecutados del franquismo.
Metieron y nos la
metieron doblada los mismitos que hoy se escandalizan porque Carolina Bescansa
metió a su bebé en el Congreso, no sé si por llamar la atención sobre la
conciliación, no sé si porque no tenía otra alternativa, no sé si por las dos
cosas a la vez. Me da igual, en cualquier caso me parece mucho más digno verla
a ella con su hijo en brazos que a Celia Villalobos jugando al Candy Crush en
el mismo lugar.
Por cierto, que no
impidieron que ese mismo día se metiese en el hemiciclo el diputado imputado
Pedro Gómez de la Serna y se sentase en el banco del Partido Popular.
Hay escaños que
huelen mucho peor que pañales usados.
@JOrtegaFr